viernes, 3 de julio de 2015

Nostalgia

                Nostalgia, de esa que muerde la panza, que es agresiva, que golpea; porque es tan profundamente hermosa que nos hace pensar en las cosas bellas que hemos tenido y hemos perdido, porque las hemos dejado perder o porque simplemente se han ido y que son tan grandes que no nos caben en el corazón ni en la cabeza cuando las recordamos y se abren espacio en medio de suspiros, que nos atan a la tierra y nos dan alas para llevarnos al momento en el que esos recuerdos fueron vivencias y nos traen olores y sensaciones y al final sonreímos, después de todo fuimos felices en ese momento y por eso es que ahora lo estamos atesorando, pero por lo menos hemos sido felices y nos queda la esperanza de volverlo a ser.

jueves, 1 de mayo de 2014

Eva Luna

"Había una vez una mujer cuyo oficio era contar cuentos. Iba por todas partes ofreciendo su mercadería, relatos de aventuras, de suspenso, de horror o de lujuria, todo a precio justo. Un mediodía de agosto se encontraba en el centro de una plaza, cuando vio avanzar hacia ella un hombre soberbio, delgado y duro como un sable. Venía cansado, con un arma en el brazo, cubierto del polvo de lugares distantes y cuando se detuvo, ella notó un olor de tristeza y supo al punto que ese hombre venía de la guerra. La soledad y la violencia le habían metido esquirlas de hierro en el alma y lo habían privado de la facultad de amarse a sí mismo. ¿Tú eres la que cuenta cuentos?, preguntó el extranjero. Para servirle, replicó ella. El hombre sacó cinco monedas de oro y se las puso en la mano. Entonces véndeme un pasado, porque el mío está lleno de sangre y de lamentos y no me sirve para transitar por la vida, he estado en tantas batallas, que por allí se me perdió hasta el nombre de mi madre, dijo. Ella no pudo negarse, porque temió que el extranjero se derrumbara en la plaza convertido en un puñado de polvo, como le ocurre finalmente a quien carece de buenos recuerdos. Le indicó que se sentara a su lado y al ver sus ojos de cerca se le dio vuelta la lástima y sintió un deseo poderoso de aprisionarlo en sus brazos. Comenzó a hablar. Toda la tarde y toda la noche estuvo construyendo un buen pasado para ese guerrero, poniendo en la tarea su vasta experiencia y la pasión que el desconocido había provocado en ella. Fue un largo discurso, porque quiso ofrecerle un destino de novela y tuvo que inventarlo todo, desde su nacimiento hasta el día presente, sus sueños, anhelos y secretos, la vida de sus padres y hermanos y hasta la geografía y la historia de su tierra. Por fin amaneció y en la primera luz del día ella comprobó que el olor de la tristeza se había esfumado. Suspiró, cerró los ojos y al sentir su espíritu vacío como el de un recién nacido, comprendió que en el afán de complacerlo le había entregado su propia memoria, ya no sabía qué era suyo y cuánto ahora pertenecía a él, sus pasados habían quedado anudados en una sola trenza. Había entrado hasta el fondo en su propio cuento y ya no podía recoger sus palabras, pero tampoco quiso hacerlo y se abandonó al placer de fundirse con él en la misma historia."
 
Hoy tengo ganas de vender cuentos, de regalar pasados e inventar futuros; mi situación es irremediable, traigo un amor pegado a las espaldas y la ilusión de hallarlo me mueve en medio de la cotidianidad, encuentro sus mensajes como códigos secretos incrustados aquí y allá a través de las páginas de un libro o en las tonadas de una canción, desde la distancia se comunica y en la cercanía de los ojos que se miran a través del cielo recuerdo sus aromas, aromas que vienen de sitios remotos, de costumbres olvidadas, de lágrimas derramas en soledad y de sonrisas sin razón.

sábado, 22 de marzo de 2014

Capitulo 7


“Te dibujo” respondí sin pensarlo demasiado mientras permitía que mis dedos siguieran sin rumbo las siluetas de tu cuerpo; recorriéndolas una y otra vez ante tu mirada expectante, con los ojos cerrados trate de aprenderlas de memoria, como si quisiera guardarlas para siempre en medio de las cosas que más aprecio y al lado de las cosas más bellas: Debe ser que aun tengo trozos de Rayuela incrustados en los ojos.

                                                                    Rayuela (Capitulo 7)

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

jueves, 21 de noviembre de 2013

A veces


A veces, pero solo a veces, no soy tan valiente y temerario como aparento, a veces y solo a veces necesito de abrazos, de que me digan cosas dulces y que me traten como a un niño, a veces no soy tan inteligente como aparento, a veces y solo a veces me gusta perderme en los imaginarios estúpidos de los cuales soy artífice, me rio solo; me rio como loco dejándome llevar por ellos, encuentro poéticas algunas miradas y claro desconozco lo bien estructurado de la realidad, a veces también me gusta  comer helados y olvidarme que ya no soy tan joven, en ocasiones añoro la tibieza de los cuerpos amados y la humedad de los labios besados en  una noche de lluvia.  De vez en cuando, cuando los días son largos y las noches cortas me hago frágil como una sombra y mientras recorro las calles oscuras pegado a mis recuerdos anhelo la luna llena para hacerme más claro frente a ellos; quiero saberme  más hombre y menos sueño, hay días, como el de hoy, en los que me dejo llevar tan solo para comprobar  que tengo un corazón que late y un cuerpo que vibra con sus latidos, pero claro esto solo pasa a veces, las veces en las que me deshago en anhelos y la música se hace la mejor aliada mientras viajo en el bus que me llevara a casa, las veces que me pregunto qué hubiera pasado, para responderme preguntándome que pasará

jueves, 9 de mayo de 2013

09/05/2013


              Heme aquí, preso de uno de esos libros escritos de cualquier manera y con las ideas revueltas, como si el autor hubiese deseado hurgar en su cabeza y en medio de todas las cajas llenas de recuerdos se hubiera dejado llevar por el paroxismo de la melancolía, encontrándose frente a frente  con su inmensa complejidad. En medio de las paginas sueltas he quedado atrapado y no he tenido más remedio que dedicarme a contemplar la belleza de la luz de la tarde que entrando tenue a través de los ojos resalta los colores cálidos de las historias de lontananza, todo lo oído, todo lo olido, todo lo visto reunido en un solo cuarto cerrado apenas por una boca que solo comparte su tesoro cuando sonríe de manera desprevenida.

             No lo puedo negar, me he sentido extasiado, excitado! La maquinaria vieja de mi cerebro ha empezado a moverse de nuevo y en medio de este día a día que me había acallado he encontrado palabras remendadas que de seguro de algo han de servir, en medio de las miles de llamadas que hacen en mi trabajo he encontrado espacio para zurcir unas con otras y fabricarme un globo, quizá necesite más que 80 días para darle la vuelta al mundo (a mi mundo), pero mientras tenga recuerdos y cosas por descubrir con las que pueda echar a andar este aparato al que llamo vida, puedo estar seguro que no me faltaran historias para contar ni besos para dar.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Sin titulo 1


Hace ya algún tiempo que no llovía en la ciudad, se me habían olvidado los largos trancones, los buses atestados de personas y la nostalgia húmeda de la lluvia invadiéndome con cada gota, tengo que reconocerlo los días no han sido fáciles, se me han puesto duras las ideas y he perdido un poco el sentido: el control. Las estrellas ya no forman constelaciones, más bien son una serie de puntos para unir sin ningún tipo de numeración, el viento frio me ha recordado las narices que hermosas se sonrojan y los cafés calientes que me gusta beber al final de una larga caminata en una noche gélida como esta, he olvidado la música que suele acompañarme, pero no he olvidado lo hermosa que es, las manos en los bolsillos juegan a encontrarse mientras todo alrededor gira sin tener ni idea que para mí, el mundo se detuvo y que ahora te tengo tan metida en mi piel que dudo mucho que después de esta noche pueda venir un día mas sin ti.

martes, 5 de febrero de 2013

Other side of the world



Sin Palabras... bueno, solo unas

Si alguna vez nos hemos levantado solos en el lado equivocado de la cama extrañando la tibieza de un cuerpo que ya no está a nuestro lado es porque seguramente hemos amado, no solo con la piel sino con todo lo que podemos ser, y en cada instante de lo que hemos compartido hemos puesto nuestra alma dejando partes de nosotros mismos pegadas en el momento incrustadas como diamantes, como podemos esperar que no nos haga falta alguien cuando se ha llevado parte de nosotros mismos? Como esperar que la cama no sea demasiado grande y el corazón no sea demasiado pequeño?  Ni hablar, al final nosotros seguiremos  dándolo todo para hacer de cada momento algo especial , para eso fuimos hechos y algún día el levantarnos del lado equivocado de la cama será levantarnos del lado correcto de la vida, y mientras eso pasa no nos queda más remedio que vivir con pasión, sonreír, llorar, maldecir, comer dulces en la noche, ir por un helado, ver cine y beber una cerveza, para que al final del cuento seamos nosotros los protagonistas de la historia y no el tiempo perdido junto alguien que no nos supo ver a pesar de tenernos en frente.

lunes, 4 de febrero de 2013

A-Marte


Yo solo quiero volar junto a ti:

No te puedo dar un avión…

Te regalo un globo…

Vayamos juntos a la Luna,

Tomémonos la Vía Láctea,

Quiero ir contigo a Venus,

Pero sobre todo quiero a-Marte

domingo, 3 de febrero de 2013

Don´t you let me go tonight


Tantas cosas quise escribir sobre esta canción que la cabeza se me hizo un nudo y las palabras me abandonaron, la cabeza se me lleno de recuerdos y me olvide de todo lo demás para entregarme a los placeres de la remembranza, sin sentido deje que el tiempo pasara con los ojos abiertos recostado en mi cama mientras la escuche varias veces disfrutando cada una de la frases que la componen, yendo y viniendo mil veces desde mis sentimientos hasta la realidad, haciéndome débil con el inicio y muy fuerte con el final, como una montaña rusa que me hacia desear gritar de emoción, de felicidad: “dont u let me go tonight”

martes, 29 de enero de 2013

The time is now

You're the first thing
And the last thing on my mind
In your arms I feel
Sunshine
 
 
Sin importar lo que suceda solo quiero sumergirme en el momento, olvidarme del ayer y del mañana rompiendo las ataduras de este presente, encontrándote en el ultimo de mis pensamientos al dormir y en mis sonrisas al despertar, haciéndote luna llena en otoño y sol de verano, para al final entender que el tiempo no existe y no existirá si no es a tu lado.

lunes, 21 de enero de 2013

Soon We'll Be Found

Un día aprendemos a hablar con los ojos: con el alma, con las manos: con el corazón, e inventamos mundos para compartir; hechos de día a día, un poco de sufrimiento quizá y un tanto de sonrisas, nos pintamos de colores y hacemos de la vida un circo, nos salen alas y raíces y lagrimas de vez en vez; porque ese es el amor, y nos llenamos de ganas, de fe, de ilusiones y construimos castillos en la arena  o en las nubes, porque sin importar donde estén lo importante es tener algo a lo que podamos llamar hogar, y en medio del idilio nos perdemos para al final darnos cuenta que olvidamos dejar las migajas de pan y que el retorno al mundo real no será fácil, esperamos de la manera más inocente que todo haya sido un sueño y que un mero abrazo nos lleve de nuevo al colorido mundo que habíamos inventado.